Inflamación del hígado producido por una infección con el virus de la hepatitis B, se
puede contagiar a través del contacto de sangre o fluidos corporales; por ello es
indispensable que el niño reciba la vacuna dentro de las primeras 12 horas de vida ya
que disminuye el riesgo de transmisión madre e hijo.

Hepatitis B:
Reacciones esperadas: dolor leve en el sitio de punción, irritabilidad,
eritema y/o edema, el cual debe ceder y no aumentar.

 

Vacuna contra la hepatitis B.

La vacuna generalmente se aplica en 2, 3 o 4 inyecciones.

Los bebés deberían tener su primera dosis de la vacuna contra la hepatitis B al momento de su nacimiento y completar la serie a los 6 meses de edad (a veces completar la serie puede tomar más de 6 meses).

Todos los niños y adolescentes menores de 19 años a quienes no se les haya suministrado su dosis, también deberían ser vacunados.

 

¿Por qué es necesario vacunarse?

La vacuna contra la hepatitis B puede prevenir la hepatitis B. La hepatitis B es una enfermedad del hígado que puede causar una afección moderada que dura unas pocas semanas, o puede convertirse en una afección grave para toda la vida.

• La infección aguda por hepatitis B es una afección de corto plazo que puede causar fiebre, fatiga, pérdida del apetito, nausea, vómitos, ictericia (coloración amarilla de la piel o los ojos, orina oscura, evacuaciones con color de arcilla), y dolor en los músculos, las articulaciones y el estómago.
• La infección crónica por hepatitis B es una afección a largo plazo que se da cuando el virus de la hepatitis B permanece en el organismo de la persona. La mayoría de las personas que desarrollan hepatitis B crónica no tienen síntomas, aun así, la afección es muy grave y puede resultar en daño hepático (cirrosis), cáncer hepático y la muerte. Las personas infectadas crónicamente pueden contagiar a otras con el virus de la hepatitis B, incluso si no se sienten o se ven enfermas.